Espíritu trabajador.

Basado en hechos reales.

Como buenas estudiantes, una de nosotras (no diré quién) decidió que trabajar una de las últimas semanas que tenemos libres antes de empezar la batalla que suponen los exámenes era la mejor idea para ir recaudando dinero para el verano y lo que se avecina después..

Entonces, la que tiene menos flequillo de nosotras, se puso a buscar trabajo por internet. Tras enviar muchos , pero que muchos CV's para distintos tipos de eventos, por fín su móvil sonó: había sido contratada para trabajar en un evento de cuatro días.

La verdad es que el evento no era gran cosa, ni estaba bien pagado, pero bueno, de vez en cuando, digamos que hay que comer un poco de m* y poner buena cara, pero claro, una vez que estás dispuesto a comer m* tus jefes se piensan que te da igual 1 tonelada que 4, y ya se empiezan a aprovechar de ti......



.....La adorable clienta de la empresa que me había contratado tuvo la genial idea de hacerme ir a tomar por culo desde mi humilde morada un soleado domingo para recoger el uniforme. Tuve que pedirle a la sobrina de un catedrático que me acercara (de nuevo mis agradecimientos) y cuando llegamos al sitio en cuestión, no sólo no quiso salir a dármelo, sino que tuve que recorrer el laberíntico recinto ferial hasta encontrarla y, una vez ahí , postrada frente a ella, tener que esperar a que terminase de charlotear con sus compis.

Poco a poco, tus ganas de exterminar a la raza humana se van sumando cuando una serie de acontecimientos de tocan los huevos: poco salario, ir un domingo a tomar por culo, q pasen de tu cara... pero, en ese momento ocurrirían tres cosas que me darían ganas de sacar mi vena más matazadetexas: la muy z* se había olvidado de mi uniforme en casa, ni si quiera me dio mi pase y además, empezábamos a trabajar una hora antes y por el mismo sueldo, lo que hace un total de 10 horas diarias por 50 euros.

En ese momento noté un pequeño tic nervioso en mi ojo derecho y la vena de mi yugular a punto de estallar, pero como en esos momentos sólo piensas en el dinero pre-exámenes tienes que sonreír como una gilipollas mientras cambias tu expresión a la cara más borde del mundo y decirle que no piensas volver ese día ni a por el uniforme ni nada, y la tía , claro, te dice que no vuelvas, pero no por tí, sino porque pasa de ir a su casa a por él.

Entonces, te piras a tu casa o a donde tengas que ir, cagándote en la puta mientras piensas que te has gastado tu saldo en llamarla, te lo ha cogido, has hablado con ella, la has buscado y todo ello en vez de decirte por teléfono: lo siento, no tengo tu uniforme, pero noooooooo, claro que no, a ella se la suda.

Tras esto, iba a retomar mi viaje con la sobrina de aquel catedrático de la que he hablado antes, para ir a visitar a muchos sobrinos y sobrino nietos de catedrático, y por supuesto, debido a este incidente llegábamos tarde. Dispuestas a salir del parking nos topamos con un señor, garrulo donde los haya, pegándose con la máquina de validar tickets y creando un atasco en la salida del recinto, que, entre el cabreo que llevas, el solamen pegándote en la nuca y que llegas aún más tarde te va aumentando tu ira hacia el universo.

Pero claro, en ese momento te das cuenta de que tu ira no acabará ahí, sino que se irá sumando durante los días que dure el evento... Entonces intentas relajarte y te piensas si realmente merece la pena currar en esa m* o no... pero tu conciencia te dice "bueno, si sólo son 4 días , qué mas da..." y te das cuenta de que no es para tanto.. sigues con tu día y esa noche te acuestas tranquilamente..

Al día siguiente, me levanté por la mañana sin uniforme y sin acreditación para pasar al recinto. No es la primera vez que entraba sin acreditación, pero es que ese día era super especial porque resulta que venía una princesita a visitarlo todo! y no! no os confundáis porque esa princesita no era yo .. no era nada más y nada menos que la Princesa de Asturias!
Evidentemente, este hecho, a MÍ me la pelaba, pero claro, vete tú a decirles a los maromos seguratas de la Casa Real que quieres pasar dentro de la feria sin acreditación porque vienes a trabajar como azafata cuando lo único que llevas puesto es una sudadera del Primark de 9 euros, las zapatillas más cutres que venden en el Mari Paz y unos vaqueros de hace 5 años... pues.. como que no cuela.

En ese momento, notaba en el ojo derecho una extraña sensación y, aunque lo asocié con cierto tic nervioso mencionado con anterioriad, en ese momento no era consciente de la verdadera causa... Pero, volviendo tema principal.. llamé por teléfono a la señora que el día anterior me hizo ir hasta ahí para darme el uniforme y la acreditación y no me lo dio, y me citó en un punto estratégico en el que quería que nos encontrásemos, pero por supuesto, tampoco me dejaron pasar, así que le hice una llamada perdida para que me llamase ella a mí (no te jode) y decirle que no podía entrar ahí y, como a los diez minutos me llama.. y yo aliviada, cogí el teléfono.. y me dijo : "Hola, quién eres?" y yo como PERO COMO Q QIEN SOY Z***********A, pero no tuve más remedio que mantener la calma y decirle que fuese a donde estaba yo, y por fín salió y me dio el p*uniforme y la acreditación.

Una vez dentro , todo parecía ir sobre ruedas hasta que algo en el ojo no paraba de molestarme, no veía nada, pensé que era por el cabreo que llevaba encima, pero duró todo el día acompañado de arcadas y mareos, así que le pedí algo de medicina a mi adorable jefa. Pasaron casi dos horas hasta que me hizo caso.

Entonces, yo le preguntaba a ella que qué quería que hiciera, y pasaba de mí, para venir cada media hora a echarme la bronca porque decía que no estaba haciendo nada.. y cuando le preguntaba qué quería que hiciera, más de lo mismo. En fin , que ese día viendo mi malestar general matutino (y que conste, antes de saber que el curro era un jodido truño) llamé a la agencia y pedí que fuese otra chica al día siguiente , que yo me encontraba muy mal, y afortunadamente me hicieron caso. Ese día llegué a casa con la peor de las jaquecas del mundo y medio ciega del ojo derecho. Mi buena madre me obligó a ir al médico donde me dijeron que iba a empezar a tener migrañas debido al ESTRÉS (nos ha jodío) y me pusieron una inyección en el culito.